viernes, 22 de octubre de 2010

Time After Time / Tiempo fuera del tiempo


Acostada en mi cama, escucho el tic tac del reloj, y pienso en ti
Atrapada en los círculos, la confusión no es nada nuevo
Flash back, la noche tibia, casi dejó atrás maleta de recuerdos ... Tiempo después

A veces tú me fotografías, pero yo ya estoy caminando demasiado lejos
Estás llamándome, no puedo escuchar lo que has dicho
Entonces dices - "Ve despacio, pues Yo me estoy quedando atrás - (y no es lo que quiero)"
La segunda mano alivia ...

Si estás perdido, puedes buscar y me encontrarás, una y otra vez
Si te caes te sujetaré, estaré esperando, una y otra vez, pero con el tiempo fuera del tiempo

Me corro de lugar, mi imagen se te desvanece, y la oscuridad se te ha vuelto gris
Mirando por las ventanas, te estás preguntando si estoy bien
Secretos, robados, desde lo más profundo, El tambor suena fuera de tiempo ...

El tema al que la canción remite es el destiempo. A todos nos sucede que tenemos que enfrentarnos, dolorosamente, a destiempos vinculares. Aurora Greenway dijo en su película: "De alguna manera, el amor que ellos sintieron por mí, no se condijo con el momento en que Yo los amé a cada quien".
Muy a pesar de que, como seres humanos que intentamos encontrar el momento propicio para ejecutar ciertos actos, la vida nos demuestra con el recurso del "destiempo" que es menester mostrar lo que se siente en el momento en que se siente. Porque las consecuencias psíquicas del destiempo pueden ser devastadoras. Quiero decir: si bien puede ser que temamos tirarnos a la pileta pensando que podemos no encontrar agua y darnos contra el suelo, quizás, por no arriesgarnos, puede llegar a sucedernos que, luego de un tiempo, nos enteremos que no sólo sí había agua en la pileta, sino que también estaba a la temperatura justa y necesaria para que pasemos un buen tiempo.
En la vida no se trata de ser capaces de encontrar el momento justo. Después de todo, nunca llega ese instante en el que las condiciones son perfectas como para hacer un deseo realidad, decir lo que en otros tiempos no considerábamos "ubicado" o hasta realizar lo que desde hace años queríamos efectuar. Claro está que por no querer chocarnos contra una pared, solemos reprimir nuestros actos (y hasta muchas veces sólo los reprimimos por responder a mandatos sociales que nos 'indican' qué está bien y qué está mal hacer). Esa veda que nos imponemos, puede generar un mayor daño del que puede producirnos no responder a la voz interna y seguir escuchando las voces de los que nos rodean o hasta la voz interna que me "previene" de posibles dolores.
¿Acaso no nos duele muchísimo más si descubrimos que, por no arriesgarnos a hacer lo que deseábamos -siempre que no implique el riesgo de la vida propia y del otro-, nos perdimos la felicidad?
Retomando un poco una publicación anterior, y combinándola con ésta, puedo afirmar que el darnos cuenta del valor lo que teníamos una vez que lo perdimos, viene a causa de dejarse estar y permitir que el destiempo nos gane. Y ciertamente, ¡¡¡no vale la pena que el destiempo salga invicto!!! La vida es corta y el destiempo es su peor pecado.
¿Moraleja? Arriesgarse A TIEMPO! Después de todo, Cronos no es vidente ni tiene el poder de atraparnos: sólo es intérprete simultáneo de nuestras acciones. No dejemos que nos ate a su tic-tac porque es entonces cuando gana el doloroso destiempo vincular y nos merecemos ser felices dentro del tiempo y no fuera de éste.

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